Estimados lectores, con gusto compartimos con ustedes la experiencia que tuvimos como Escuela de Animación Bíblica, el pasado mes de octubre, cuando se impartió un Taller de Metodología Bíblica Popular en la Parroquia de San José Obrero de Puerto Vallarta, a invitación del párroco Francisco Palacios.
La invitación al taller
En un taller se trabaja de manera cercana con los asistentes, existiendo la retroalimentación. El objetivo del taller fue: “Introducirlos a la lectura, reflexión, profundización y oración de la Palabra, para aprender a saborearla y despertar el interés por su estudio y profundización a la luz de las realidades de la vida”.
El taller fue impartido, del 18 al 23 de octubre pasado, por un equipo de seis personas Animadoras de la Escuela: Armanda Cervera Navarrete, María de Lourdes Retes Martínez, Berenice Parra Ramos, Teresa González Muñoz, Ana Arcelia Carrillo Muñoz y la Hermana Liliana Castro Quintero. Se inició el domingo con la invitación abierta a la comunidad que participa en las distintas Eucaristías del día.
En este tiempo de crisis: económica, de valores y de fe, hablar con Dios y de Dios no es fácil, mucho menos en Vallarta, que por ser un lugar turístico se le asocia con ruidos y diversión. Pero como bien dice la Palabra, ”los pensamientos de Dios no son nuestros pensamientos, ni sus caminos son nuestros caminos (Cfr. 56, 8). La respuesta fue dada con gran entusiasmo en calidad y en cantidad: fueron poco más de 150 personas las convocadas a vivir y compartir este encuentro con la Palabra encarnada.
Desde el primer día del taller, el día lunes, los asistentes superaron toda expectativa, ya que hubo dos grupos en diferentes horarios: por la tarde, de 5:00 a 8:00 pm, y por la noche de 8:30 a 11:00; gracias a Dios, los dos grupos consistentes.
La temática
Los temas tratados en la semana fueron:
1. Cómo se relacionaba Jesús con la Palabra de Dios.
2. El método que Jesús utilizó para enseñar la Biblia al pueblo.
3. El riesgo de una lectura fundamentalista de la Palabra de Dios.
4. La Mística que debe animar la lectura orante de la Biblia.
5. Dinámica de Lectio Divina en pequeños grupos, donde se escuchó, gustó y saboreó la Palabra, experimentando juntos que Dios sigue hablando y acompañando a la humanidad. El tema fue “Jesús es la llave de las Escrituras para las comunidades”.
Frutos abundantes
Dios, en su gratuidad, permitió contemplar frutos, tanto en quienes impartieron los temas como quienes los recibieron e interactuaron en las distintas dinámicas que se realizaron: cantos, símbolos, representaciones alusivas al tema, complementadas según la temática del día, con: momentos de reflexión, oración vivencial, adoración al Santísimo y la Eucaristía presidida por el Padre Palacios.
También se pudo percibir en el grupo participante personas que ya llevan un proceso de formación bíblica, comprometidas conforme a su ser cristiano y ávidas de mayor conocimiento de la Palabra de Dios, lo que se notaba en su forma de ser y responder. La Lectio Divina les era familiar en la parroquia. A lo largo del taller expresaron interés en darle continuidad a la experiencia, moción que por parte de la escuela se acogió con disponibilidad.
En el taller se muestra desde la Escritura que Jesús es nuestro Maestro ¡también en metodología para enseñar Biblia!; que Él nos instruye en Sagrada Escritura y en la escucha de Dios en la vida. Jesús es el metodólogo por excelencia, supo integrar realidad Bibia y comunidad.
Al finalizar el taller, disfrutamos unos ricos tamales con atole y la alegría del compartir fraterno.
Testimonios de los participantes
- He asistido a muchos congresos y conferencias, pero no había logrado vivir ese encuentro con Jesús (Pedro).
• Aprendí el riesgo de una lectura fundamentalista y que la Palabra de Dios es liberadora (Luis).
• Es la primera vez que asisto, vine a traer a mi mamá y me quise retirar, pero mi carro quedó cercado por muchos autos y me quedé; el Señor me tomó y no perdí ni un solo día, deseo seguir este estudio. ¿Será posible que la Escuela se abra aquí? (María de la Luz).
La misión es grande, hay mucho por hacer, la sed y el hambre de las personas de estudiar, profundizar y orar la Palabra desde las realidades de la vida es grande, según expresaron ellos mismos: “Queremos estudiar la Biblia con un método sencillo, saber que no estamos solos, que Dios camina con nosotros y descubrir cuál es nuestra misión”.
“Desconocer la Escritura es desconocer a Jesucristo y renunciar a anunciarlo” (DA, n. 247).
Ana Arcelia Carrillo Muñoz / Teresa González Muñoz
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