XV Encuentro Eucarístico Internacional de la Pía Unión de Adoradores Seglares
«Dios es amor, venid y adoremos» fue el lema del XV Encuentro Eucarístico Internacional de la Pía Unión de Adoradores Seglares, celebrado los días 5, 6 y 7 de octubre en el Templo de María Reina de la Paz, que pertenece al monasterio de las Madres Adoratrices, en la Diócesis de Tepic.
En el marco del evento se celebraron asimismo, a nivel internacional, los 200 años de la fundación de la Orden de las Madres Adoratrices del Santísimo Sacramento, 50 años de presencia en la Diócesis de Tepic, y 15 años de la formación del grupo de la Pía Unión de Adoradores Seglares.
Desde hora temprana del primer día comenzaron a llegar alrededor de 500 personas, entre religiosas, religiosos, sacerdotes y adoradores, provenientes de todas partes de la República Mexicana, como Querétaro, Ciudad Guzmán, Autlán y Guadalajara, Jalisco; Nuevo Laredo, Tamaulipas; Cuernavaca y Cuautla, Morelos; Rosarito y Tijuana, Baja California; Uruapan, Michoacán; San Juan Ixhuatepec y Atzcapotzalco, Estado de México; Monterrey, Nuevo León; Culiacán y Mazatlán, Sinaloa; El Paso, Texas y, por supuesto, de Tepic.
El encuentro se inició con una marcha, donde todas las delegaciones acompañaron al Santísimo Sacramento desde la Parroquia de la Inmaculada Concepción hasta el templo en construcción de María Reina de la Paz.
«Dios es amor», «La Eucaristía», «María sagrario y primera adoradora del Padre en el corazón del Hijo», «Venid, adoremos» e «Historia de la orden», fueron los temas que se trataron de manera profunda a lo largo de estos tres días.
El Padre José Humberto Meda Lomelí, asesor diocesano de la Pía Unión de Adoradores Seglares, señaló: «Es importante realizar congresos eucarísticos porque se renueva lo más importante de nuestra fe, el amor a Cristo en la Eucaristía». Y luego advirtió: «No olvidemos que sin la Eucaristía no somos nada, y con ella se da la verdadera oración. Poco a poco, cuando nos unimos a Cristo, en la Eucaristía, sucede un cambio en nosotros, el cual no es muy visto ni aparatoso, pero sí es un cambio profundo».
Después de una jornada de tres días se dio por clausurado el encuentro con una Celebración Eucarística, presidida por Mons. José Antonio Pérez Sánchez, Obispo de la Prelatura del Nayar.
Camino a Monterrey
El próximo encuentro Eucarístico Internacional tendrá su sede en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, en el año 2009. El Presidente de la Pía Unión de esa ciudad dijo al respecto: «Estamos entre gustosos y nerviosos, no sabemos ni cómo reaccionar, la verdad es que vamos a poner todo nuestro esfuerzo para que salga bien, nos pondremos en manos de Dios, pues Él tiene que ser el que resuelva todo», y parafraseando a San Agustín concluyó: «Sólo tú puedes hacer las cosas, yo aquí estoy para servirte, tú haz conmigo lo que tengas que hacer».
Algunos asistentes al congreso compartieron sus impresiones con los lectores de La Senda:
Sor María Yamilee de la Encarnación, San Juan Ixhuatepec, Estado de México
«Me sentí muy contenta, y me voy muy motivada; espero que el milagro de la Eucaristía sea un milagro para todos los adoradores y para la gente que necesita de Jesús y no lo puede conocer; que lo llevemos a todo el mundo».
Óscar Lozano, Monterrey, Nuevo León
«Es la primera vez que asisto a un encuentro de este tipo, y mi experiencia fue maravillosa, pues hemos vivido algo definitivamente inexplicable: Dios nos ha dado muchas bendiciones y es importante que se realicen encuentros eucarísticos, porque se necesita que la gente viva y muestre la vida de Dios».
Fray Martín, Monasterio de Apulco, Jalisco
«Dios quiera que estos encuentros den un fruto positivo, para que puedan surgir más laicos que quieran integrarse; éste es un buen motivo, porque la oración promueve que haya más gente que se integre».
Celia García, El Paso, Texas
«Es la segunda vez que asisto a un encuentro eucarístico, y siento mucha alegría, emoción, refugio y protección. Me motivó a vivir la alegría de estar más cerca de Jesús, para sentirlo».
Irma Patricia Valdez Parra