En el 14 de febrero, Día del Amor y la Amistad, se regalan flores, globos y chocolates, porque se conmemora el amor de muchas parejas, y nacen nuevas relaciones personales. Por esta razón es importante analizar las costumbres y actos que se llevan a cabo durante este día.
Antecedentes del Día del Amor
Cuenta la historia de un emperador romano llamado Claudio III que no creía en el amor, decía que los soldados enamorados y casados no eran eficientes, por lo que prohibió los casamientos; caso contrario a lo que pensaba un mártir cristiano llamado Valentino, quien en secreto se dedicaba a casar parejas enamoradas, hecho que lamentablemente lo llevó a la muerte, ya que por no haber obedecido las órdenes del emperador fue sacrificado el 14 de febrero del año 270; posteriormente, y en honor a este mártir se instauró la celebración del Día de San Valentín, haciéndose oficial en 1969.
Por otro lado está la famosa leyenda de una pareja de jóvenes enamorados que fueron separados por sus familias, y al no poder verse tuvieron que demostrarse su amor por medio de mensajes; ella encendía una lámpara que iluminaba su ventana y él, como respuesta, le dejaba una piedra. Finalmente, en una ocasión la señal no apareció y esperando afuera de la ventana de su amada, el joven murió de frío. A partir de entonces y recordando a esta pareja se celebra el 14 de febrero como el Día de los Enamorados.
Comportamiento personal y sentimientos
Luego de un breve paseo por los antecedentes de esta celebración, reflexionemos en los más profundos motivos por los que festejamos, y valoremos qué hay detrás del comportamiento personal y los sentimientos que experimentamos en esta fecha. Sobre todo, hagamos conciencia de si en realidad amamos a la otra persona siguiendo la regla de que, previamente, hay que amarnos nosotros mismos y tener una autoestima saludable para poder querer y tener una relación sana o, en su caso, darnos cuenta de si en el fondo estamos con una persona para encontrar en ella algo que se busca y se necesita, o por cosas extras a lo emocional; por ejemplo, satisfacer necesidades de índole económica o porque proporciona emocionalmente una estabilidad que como individuo no se puede alcanzar, e incluso porque existe un vínculo codependiente marcado y solo se sigue un patrón de conducta aprendido, el cual se sigue sin ser consciente del todo. Como ejemplo: tantos casos que se conocen parejas que sufren violencia por los motivos ya expuestos anteriormente, mujeres violentadas y hombres golpeadores cegados por los celos, inseguridad e inestabilidad emocional. Y esto no solo se vive en el noviazgo, sino en el matrimonio con problemas de violencia intrafamiliar, esposas y esposos golpeados y sufriendo maltrato psicológico, económico, físico, entre otros.
Buscar relaciones sanas
Muchas personas que sufren de una separación y que depositaban su estabilidad emocional en la pareja, ante la pérdida o ruptura de la relación recurren a las drogas, buscando sustituir aquella satisfacción que brindaba la pareja. Algunos matrimonios, de igual manera, optan por una sustancia o alguna otra conducta adictiva como las redes sociales (facebook, whatsapp, etcétera), para sustituir ese contacto o cercanía que la pareja proporcionaba.
Aclarando que esta festividad en sí no es dañina, es importante tener presente lo analizado anteriormente y disponerse a festejar de forma genuina y saludable sin caer en excesos o en consumismo, sin olvidar disfrutar y respetando las decisiones del otro para que no sobrepasen sus intereses ni los de su pareja.
Cabe destacar que al buscar pareja es frecuente seleccionar personas con ciertas características emocionales, psicológicas y físicas; esto pasa en todas o casi todas las personas, y no necesariamente es malo, siempre y cuando la relación no le haga pasar por encima de sus intereses o, en su caso, no busque a otra persona tratando de sustituir la relación anterior.
Centros de Integración Juvenil, AC
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