“Llamadas para una gran tarea”

Jornada Diocesana de la Vida Consagrada

 

 

Del 2 al 6 de febrero se realizó la Jornada Diocesana de Oración de la Vida Consagrada, a la que todas las congregaciones presentes en la Diócesis de Tepic fueron invitadas para compartir algunos temas de reflexión y su testimonio con quienes colaboran en los diferentes apostolados. La jornada culminó en Puerto Vallarta los días 7 y 8.

El sábado 7, las distintas congregaciones se dieron cita en el Colegio Niños Héroes, de las Siervas de Jesús Sacramentado en Puerto Vallarta, donde el Padre Roberto Cordero, párroco de Nuestra Señora de Guadalupe, dirigió una reflexión, en la que dijo: “Hay escasez de vocaciones por la falta de fervor apostólico contagioso, porque donde hay vida, fervor y entusiasmo, hay vocaciones”. Entonces se debe irradiar la alegría del Evangelio en la Vida Consagrada, para que el dueño de la mies mande trabajadores a sus campos. Posteriormente, el Obispo de Tepic, Mons. Luis Artemio Flores Calzada, presidió la santa Misa.

En su homilía, Flores Calzada señaló: “El objetivo del Año de la Vida Consagrada es vivir con gratitud el pasado, vivir el presente con pasión y abrazar el futuro con esperanza”, como lo afirma el Papa Francisco en su Carta a los consagrados.

Después de la Eucaristía se realizó una convivencia, en la que se compartieron el pan y las experiencias y, más tarde, las 64 religiosas presentes fueron enviadas a distintas parroquias de Puerto Vallarta para compartir con los fieles sus experiencias, su testimonio, así como el apostolado y carisma de su congregación.

Para culminar el día, a las ocho de la noche, tuvo lugar en el malecón una fiesta, donde se contó con la presencia del Obispo de Tepic, quien participó alegre y gozoso. La presencia de los jóvenes del Colegio Niños Héroes, con su dinamismo, dio un tinte jovial; cada congregación se dio a conocer a través de un video o de una presentación.

El domingo 8 de febrero se dieron cita todas las religiosas participantes en la jornada para hacer una procesión que culminó en la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe: recorrió el malecón, llevando pancartas y mensajes sobre lo que es la Vida Consagrada, entonando cantos y alabanzas.

La procesión terminó con la Celebración Eucarística presidida por Mons. Flores Calzada, quien dijo que “Dios ha escogido a algunos hermanos y hermanas para que vivan más plenamente la vida cristiana, y en este año de la Vida Consagrada hay que dar gracias a Dios porque nos da el Espíritu Santo para dar testimonio de su amor”.

 

Comisión Diocesana de Vida Consagrada

 

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