Vacaciones de Semana Santa

Tiempo de alcohol para los adolescentes

 

 

El consumo de alcohol durante la Semana Santa aumenta de manera drástica entre los vacacionistas, principalmente los que se encuentran en la playa, teniendo consecuencias graves.

El alcohol provoca que se distorsione la percepción de la realidad, lo cual puede llevar a las personas  a situaciones de riesgo debido a que, al estar consumiendo, no prestamos atención a los peligros y mucho menos en un lugar donde el ambiente puede llegar a ser desconocido.

 

Cuerpo y madurez en formación

Los jóvenes se encuentran en constante riesgo por aprender de ciertos patrones de consumo debido a varios factores:

–       Fisiológicamente se encuentran todavía experimentando cambios en su desarrollo.

–       El cerebro del adolescente se encuentra en un alto nivel de cambios. Dicho desarrollo establece las bases para las habilidades de la persona en su vida adulta como la planeación, la integración de información, la resolución de problemas, el discernimiento y el razonamiento.

Estos importantes cambios que están sucediendo son la razón de que el cerebro adolescente sea más vulnerable a los efectos nocivos del alcohol en comparación con un cerebro adulto.

 

Abanico de consecuencias

Con la percepción distorsionada, los jóvenes, al estar consumiendo alcohol, no miden hasta dónde pueden llegar con sus actos. De aquí que sobrevengan accidentes automovilísticos por la lentitud de reflejos, violencia e incluso ahogamientos, debido a que se meten a bañar al mar en un estado casi inconsciente sin medir riesgos. Y muchas veces se ven involucradas personas que son ajenas a ellos.

En algunos lugares está permitido el consumo de alcohol en las calles o ciertos lugares públicos, sin tomar en cuenta cuánto se puede consumir y los daños que pueden causar en la vía pública. Son comunes los casos de abuso sexual hacia las mujeres (en mayoría) alcoholizadas, porque es más sencillo cometer este acto por la falta de conciencia por el abuso de alcohol.

Dentro de las consecuencias inmediatas también figura la posibilidad de bronco-aspiración, es decir, ahogarse con el propio vómito: Y puede llegar a darse la muerte causada por una congestión alcohólica. Entre las consecuencias de largo plazo entran diferentes  enfermedades como cirrosis hepática, psicosis alcohólica, trastornos de la personalidad, cardiopatías alcohólicas, trastornos de la piel y la muerte.

Causas a las que poner atención

El problema en muchas ocasiones comienza desde casa, debido a que algunos padres suelen  consumir alcohol y, por consecuencia, los hijos siguen dicho comportamiento. Algunos investigadores (Guilamo, Jaccard, Turrisi, Johanson) han mostrado que los patrones de consumo que se observan a lo largo de la vida pueden desarrollarse antes de los quince años.

Entre las calles de México, son populares los depósitos o expendios de alcohol, así como tiendas de autoservicio, con lo cual el poder obtener este producto es bastante sencillo. Aún cuando hay leyes que estipulan que solo se debe vender a personas mayores de edad, esto no es respetado en todos estos establecimientos.

Algunas de las principales causas por las que los jóvenes consumen alcohol  son:

–       La presión social de parte de  sus pares, porque sienten que para pertenecer a un grupo social deben de seguir los mismos comportamientos que ellos.

–       Los problemas familiares, ya que los jóvenes, al sentirse incomprendidos, solos, rechazados, por parte de sus padres o al vivir en un ambiente familiar tenso, buscan la salida fácil de refugiarse en la bebida.

–       La promoción de bebidas alcohólicas en los medios publicitarios influye en la decisión que toman los adolescentes para beber y aumentar su consumo.

 

Prevención y formas alternativas de diversión

Como padre de familia tenga en cuenta lo siguiente:

  • Mantenga y fomente una relación franca y de apertura con su hijo. Esto aumenta las posibilidades de que él le hable sobre sus anhelos e inquietudes.
  • Hable con su hijo sobre los riesgos del consumo de bebidas alcohólicas.
  • Hágalo de forma positiva y amena.
  • Establezca reglas claras en cuanto a la edad en la que se le permitirá beber (por ejemplo, la edad reglamentaria en su estado). Hable de estas cosas antes de que llegue a la adolescencia.

Es preciso informar al adolescente sobre las consecuencias reales del alcohol. Afortunadamente, cada vez son más los jóvenes que conocen los efectos de la bebida y las graves consecuencias en la salud y calidad de vida, pero si no se acompaña de medidas efectivas de prevención, la información no será suficiente.

Otra cosa importante para evitar la adicción será dotar al adolescente de las estrategias necesarias para eliminar los factores de riesgo que le pueden inducir a consumirlo, como mejorar su autoestima  y sus habilidades sociales. En este sentido será fundamental también ayudar al joven a soportar la presión del grupo y mostrarle formas alternativas de diversión.

 

Centros de Integración Juvenil, AC

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Comentarios al autor: (cijtepic@hotmail.com)

 

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