Mi nombre es Sandra Paz Urbina, tengo 23 años y egresé de la licenciatura en Contaduría Pública. Viví mi proceso vocacional en 2004 en Puerto Vallarta, y enseguida me integré al equipo de esa zona, en el que estoy hasta la fecha.
Crecí en la fe dentro del Movimiento de Renovación Carismática, pero sentía que me hacía falta algo más, pues ya no me era posible recibir sin dar, además de que quería poner en práctica todo lo aprendido. La vivencia de mi proceso y la integración a esta pastoral han sido un complemento en mi vida cristiana.
Trabajar por las vocaciones es una misión grande, pero hermosa a la vez; es una gracia poder ser un instrumento de Dios para ayudar a otros a descubrir su llamado. El arranque de nuevos proyectos de la Pastoral Vocacional en nuestra Zona –Costa Alegre– amplía los horizontes para dar respuesta a las necesidades de nuestros adolescentes, de los jóvenes y matrimonios.
Mi vocación laical se fortalece cuando veo cómo Dios va transformando los corazones, y esto confirma mi deseo de trabajar en esta viña. Vale la pena seguir a Jesús, vale la pena entregarse en servicio a los demás.
“La mies es mucha, los operarios pocos; envía Señor operarios a tu mies”. Dios los bendiga.
Sandra Paz Urbina