La Eucaristía: fuente de vida
- Del 30 de abril al 4 de mayo se llevó a cabo el IV Congreso Eucarístico Nacional en la ciudad de Morelia, Michoacán, cuyo objetivo fue recuperar y fortalecer la fe católica de los mexicanos.
• El Arzobispo Piero Marini asistió como representante del Papa Benedicto XVI.
La ceremonia de apertura del IV Congreso Eucarístico Nacional (IV CEN) tuvo lugar en el salón Michoacán del Centro de Convenciones; incluyó una Hora Santa, que dirigió el Obispo electo de Tlaxcala, Mons. Francisco Moreno. Como parte importante del Congreso se realizó un Simposio Teológico con cuatro conferencias magistrales: “La vivencia de la Eucaristía en la historia de México”, que expuso el presbítero Alberto Carrillo Cázares, investigador del Colegio de Michoacán y el maestro José Manuel Romero de Solís, director del Archivo Histórico Municipal de Colima; “La Eucaristía, don de Dios Padre”, que impartió el sacerdote Manuel Cázares Cruz, decano de la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de México; “La Eucaristía, memorial de la Pascua de Jesús”, que sostuvo el Padre Alberto Sanguinetti, consejero de la Facultad de Teología Monseñor Mariano Soler, de Uruguay; y “La Eucaristía, fuente de vida en el espíritu”, a cargo del sacerdote Salvador Carrillo Alday, director del Instituto de Pastoral Bíblica del centro Félix de Jesús.
Reflexiones vivas en torno a la Eucaristía
La fiesta de clausura de este IV CEN, se llevó a cabo en la Plaza Monumental de Morelia, la mañana del domingo 4 de mayo, ante más de diez mil fieles católicos, muchos de ellos provenientes de todas las Provincias Eclesiásticas de México. Desde muy temprano se abrieron las puertas del coso taurino para recibir a los delegados de las diversas diócesis y de personas de la capital michoacana. Tras una primera ambientación musical, el sacerdote moreliano Leopoldo Sánchez Pérez, expuso una catequesis sintética de los cuatro temas expuestos durante el Congreso: “La Eucaristía creída”, “La Eucaristía vivida”, “La Eucaristía celebrada” y “La Eucaristía y la familia”. Posteriormente, se presentaron varios testimonios eucarísticos. María Cristina Morón, Religiosa de la Cruz, habló en torno a la “Eucaristía creída”; su congregación rinde adoración ininterrumpida al Santísimo; de la “Eucaristía celebrada” testimonió el Padre Miguel Contreras, párroco de San Isidro, de Acámbaro, donde puso de relieve el enorme compromiso sacerdotal de llevar a la comunidad al encuentro con el Señor; una mujer seglar, la señora María Elena Beltrán, dio un testimonio de la “Eucaristía vivida”, en el que relató que, siendo ella ministro extraordinario de la Comunión, sufrió un accidente y Jesús-Eucaristía no la desamparó en ningún momento e incluso la libró de perder una pierna; finalmente, una de las niñas que ese día recibió la Primera Comunión de manos del Cardenal de Monterrey, en Catedral, hizo una oración de acción de gracias.
Jesús presente ahora y siempre
La solemne Misa de clausura fue presidida por el enviado especial de Su Santidad Benedicto XVI, Arzobispo Piero Marini, quien fue acompañado por el Arzobispo de Yucatán, Mons. Emilio Berlie, responsable de la Conferencia Episcopal en la realización de estos congresos; y del Arzobispo de Morelia, Alberto Suárez Inda, además de muchos otros prelados y más de un centenar de sacerdotes.
Mons. Marini, en su homilía, enfatizó la presencia de Cristo Resucitado ante sus discípulos en aspectos diversos: como peregrino de Emaús, como jardinero ante María Magdalena, etcétera; con lo cual –Cristo– nos quiere habituar a los cristianos de todos los tiempos a descubrir su presencia en el prójimo, y que Él está presente a través del sacerdote en cada uno de los Sacramentos, pero especialmente en la Eucaristía que es, a la vez, la fuente y la plenitud de la vida de la Iglesia. Resaltó, por último, que el IV Congreso “es un tiempo de meditación y de oración”, una invitación para que la Eucaristía sea para los fieles el medio de salvación de la vida humana y de las familias.
Para finalizar, se presentaron las “Estampas regionales”, danzas típicas, entre las que sobresalió la de “Los Viejitos” de Nahuatzen y la de “Las Aguadoras”, que emocionaron especialmente a los numerosos visitantes.
Congreso preparatorio
Este magno Congreso fue, por su oportunidad y contenidos, una preparación para el Congreso Eucarístico Internacional a realizarse en Québec, Canadá, del 15 al 22 de junio, y para el Encuentro Mundial de las Familias, del cual será sede nuestro país en enero de 2009.
CEN / Fotos: Patricia Valdez – CEN