Del pensamiento a la acción
Constantemente en nuestra vida ordinaria escuchamos hablar de acontecimientos y sucesos pasados que han marcado el mundo y a México. Y en ocasiones, conocemos los sucesos de oídas, pero tal vez desconocemos el espacio geografico en que sucedieron, no sabemos los motivos, ni el ¿porqué? ni el ¿para qué?
¿Te gusta la historia?
Resulta que no sabemos historia o que nos aburre la historia, son comunes expresiones: “¡La historia es muy aburrida!”, “¡me cuesta aprenderme fechas, lugares y nombres de personas, es por eso que la historia no me gusta!”. Más aun, no sabemos ni lo que es la historia.
Si no sabemos lo que es la historia, mucho menos sabremos lo que es lahistoricidad. Habrá algunas personas que no son conscientes de su modo específico de existir. Es decir, no disfrutan su existencia y no son conscientes del por qué y del para qué de sus vidas.
El siglo XIX fue el siglo de los grandes historiadores alemanes de la política, el arte, la filologia y la filosofía. La historia de estas áreas del conocimiento hallan en el siglo XIX alemán su siglo de oro. A este se le llamó “el Siglo de la historia”
En esta ocasión compartiré el pensamiento de un gran filósofo contemporáneo, el cual constituye un intento articulado y tenaz de construir una crítica de la razón histórica, es decir, nos transmite la importancia del conocimiento y comprensión del sentido de la historia en general y de nuestra historia personal o particular. Este filósofo es Wilhelm Dilthey.
“La historia no es algo separado de la vida”
Dilthey, entre otras cosas, nos dice: “La sociedad es nuestro mundo. Este mundo humano que tiene su centro en el individuo se configura a través de las relaciones entre individuos, en sistemas de cultura y de organizaciones sociales que poseen una existencia histórica. La estructura del mundo humano es una estructura histórica”. En términos generales el hombre, atado y determinado por la realidad vital, se libera mediante la comprensión de lo histórico. Por lo tanto, “todo lo que hay a nuestro alrededor, ha ocurrido históricamente. La historia no es algo separado de la vida, el hombre es un ser histórico, también lo son todos sus productos culturales, incluida la filosofía”.
Siendo así, al igual que las letras de una palabra, la vida y la historia tienen un sentido, y debemos estar abiertos a que el sentido y el significado de la vida surgen únicamente en el hombre y en su historia. Porque el hombre es un ser histórico, es decir, tiene historicidad. El hombre no es, sino vive, y el vivir es una constante mutación histórica. El existente humano vive el presente fundándose en el pasado y tendiendo hacia el futuro. La historicidad se presenta, por tanto, como una dimensión humana tan esencial y constitutiva como la animalidad o la racionalidad; así como no hay un hombre sin animalidad o racionalidad, tampoco lo hay sin historicidad.
El hombre es responsable de su existencia
Que el hombre sea un ser histórico significa que dispone de posibilidades y que vive para realizar el proyecto y la misión de su existencia. La idea fundamental que se quiere expresar con el concepto de historicidad es que el hombre es constitutivamente un ser de cultura, y que la creación de un mundo más humano, en colaboración con todas las generaciones, es un deber de su existencia histórica. La historicidad significa, por tanto, la responsabilidad del hombre hacia su existencia
Tú, ¿qué opinas?
Historia e historicidad
Historia: es el conjunto de hechos objetivos narrables que se suceden en el tiempo objetivo y natural.
Historicidad: es el modo específico de existir del hombre. Indica que cada ser humano realiza su propia existencia a partir de un nivel cultural alcanzado ya por otras generaciones, en tensión esencial hacia un futuro que está lleno de nuevas posibilidades; posibilidades que se presentan de ese modo al hombre porque esinteligente y libre.
Carlos García Santana
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