Del 7 al 11 de julio nos reunimos 135 sacerdotes en la casa del sacerdote “Buen Pastor” de la ciudad de Tepic, en respuesta a la convocatoria lanzada por nuestro Obispo, Mons. Ricardo Watty Urquidi; allí reflexionamos en torno al Documento conclusivo de Aparecida, además de que conocimos más de cerca el método que nos ayudará a realizar nuestro Plan de Pastoral Diocesano. Este es el inicio de los trabajos para facilitar la conversión pastoral que exige la Nueva Evangelización.
Por un nuevo Pentecostés
En la primera parte, coordinada por los padres Efraín Martínez Delgado y Miguel Agustín Estrada, se propició un acercamiento al Documento de Aparecida, mediante una guía participativa que propuso el Obispo Felipe Arizmendi, lo que favoreció el encuentro entre los asistentes en los diferentes momentos, poniendo en común las riquezas obtenidas de las reflexiones en los distintos grupos. Con esta mecánica se logró de los participantes lo que el Documento propone: despertar a los integrantes de la Iglesia a un gran impulso misionero: ¡Necesitamos un nuevo Pentecostés!
Acometer la realidad desde la formación
En un segundo momento recibimos la visita de los presbíteros Fernando Zapata Vázquez y Mario Merino Vera, del movimiento Por un Mundo Mejor, quienes nos dieron a conocer en qué consiste el método prospectivo, el cual nos ayudará a trabajar en nuestra diócesis y parroquias para tener un cambio de visión al interpretar la realidad diocesana y transformar también nuestra experiencia.
Este método –aplicado a la labor pastoral– no consiste sólo en la instrumentación de técnicas o en un conjunto de reglas para la aplicación científica de un procedimiento. La preocupación constante es la de encontrar un modo válido de planificar un área tan peculiar como es la acción pastoral. Se trata de conjugar las técnicas de planificación con las reglas de la propuesta pastoral.
Manos a la obra
Tanto el estudio del Documento de Aparecida como el conocimiento de este método nos llevó al compromiso de trabajar por tener, a la brevedad, nuestro plan de pastoral y poder hacer vida el lema del Documento de Aparecida, ser “discípulos y misioneros de Jesucristo, para que nuestros pueblos en Él tengan vida”.
Estuvo presente en el evento el Obispo Emérito de nuestra diócesis, Mons. Alfonso H. Robles Cota. Este tipo de reuniones se irán llevando a cabo con los diferentes sectores de la Iglesia diocesana. En esta ocasión correspondió el turno a los sacerdotes, en septiembre lo será para los laicos y, posteriormente, para los religiosos.
“Señor, fortalécenos a todos en la fe para que seamos tus discípulos y misioneros”.
Juan Carlos González Pérez